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Drones ucranianos atacaron cuatro aeropuertos rusos el miércoles en el mayor ataque de su tipo en la guerra, mientras las fuerzas de Kiev avanzaban más profundamente en Rusia después de una incursión transfronteriza sorpresa que dejó al Kremlin avergonzado y confundido.
El presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, elogió al ejército por los ataques, que describió como “precisos, oportunos y efectivos”, en un discurso en video publicado el mismo día en que dijo que las fuerzas de Kiev capturaron a soldados rusos en el sur de Rusia y destruyeron un avión de combate ruso.
«Nuestros drones ucranianos funcionan exactamente como deberían. Sin embargo, hay cosas que no se pueden hacer sólo con drones», afirmó Zelensky.
Una fuente del servicio de seguridad ucraniano dijo a CNN que el ataque fue el «mayor ataque» a aeropuertos rusos desde el inicio de la guerra y tuvo como objetivo cuatro bases en las regiones al suroeste de Kursk, Voronezh y Nizhny Novgorod, al este de Moscú.
Se produce cuando una incursión terrestre ucraniana a gran escala ha obligado a decenas de miles de rusos a abandonar sus hogares y ha puesto a Rusia a la defensiva mientras lucha por repeler a las fuerzas de Kiev.
El Ministerio de Defensa ruso dijo el miércoles que había destruido 117 drones y cuatro misiles tácticos sobre Kursk y áreas vecinas.
El gobernador de Voronezh, Alexander Gusev, dijo el miércoles en Telegram que más de 35 drones lanzados por Ucrania fueron destruidos sobre la ciudad.
Aunque no hubo víctimas, el ataque causó daños a propiedades, vehículos e infraestructura municipal, dijo Gusev, añadiendo que existía el riesgo de más ataques con aviones no tripulados.
La Fuerza Aérea de Ucrania «destruyó un cazabombardero ruso Su-34» en la región de Kursk el martes por la tarde, dijo el miércoles el Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Ucrania en un comunicado.
En Belgorod, en la vecina Kursk, el gobernador de la región, Vyacheslav Gladkov, declaró el miércoles el estado de emergencia regional y describió la situación sobre el terreno como «difícil y muy tensa» en un mensaje de Telegram. Los residentes comenzaron a evacuar el lunes debido al avance ucraniano.
Gladkov dijo que las autoridades regionales ahora están pidiendo al Kremlin que declare el estado de emergencia a nivel federal.
En su discurso del miércoles, Zelensky pidió más apoyo de los partidarios occidentales de Ucrania, diciendo: «Necesitamos otras armas: armas de misiles. Seguimos trabajando con nuestros socios para encontrar soluciones a largo plazo para Ucrania».
Los socios occidentales de Ucrania han expresado su renuencia a proporcionar a Kiev misiles de largo alcance capaces de penetrar profundamente en territorio ruso.
Zelensky dijo que sus fuerzas avanzaron en la región rusa de Kursk de 1 a 2 kilómetros desde el comienzo del día y capturaron a 100 soldados rusos.
Kiev ya ha anunciado que controla unos 1.000 kilómetros cuadrados (386 millas cuadradas) de territorio ruso desde el inicio de su ataque sorpresa.
Un vídeo publicado por la Agence France-Presse en un cruce fronterizo entre la región ucraniana de Sumy y Kursk mostraba un camión ucraniano que transportaba a hombres con los ojos vendados y vestidos con uniformes militares rusos mientras se alejaban de Rusia.
CNN se ha puesto en contacto con el ejército ucraniano para comentar sobre el vídeo.
La incursión ucraniana -una gran vergüenza para el Kremlin- representa un marcado cambio de táctica para Kiev, ya que representa la primera vez que fuerzas extranjeras entran en territorio ruso desde la Segunda Guerra Mundial.
Desde que comenzó la incursión, decenas de miles de rusos han huido de sus hogares mientras Moscú lucha por contener el ataque, imponiendo operaciones antiterroristas en Kursk, Belgorod y otra región fronteriza, Bryansk.
Rusia ha retirado sus reservas de zonas de combate clave en Ucrania y Crimea ocupada por Rusia para repeler el avance de Kiev, dijo un comandante militar ucraniano a CNN el miércoles.
Dmitro Kholoud, comandante del batallón Nightingale, dijo a un equipo de CNN en Sumy que el ejército tiene «información» que indica que los soldados rusos están siendo retirados de Zaporizhzhia, Crimea y Kharkov para detener a las fuerzas de Kiev.
Un ministro ucraniano dijo que el objetivo de la operación en Kursk era crear una «zona de seguridad» en territorio ruso para proteger a las comunidades fronterizas, especialmente en Sumy, que ha sido testigo de continuos bombardeos rusos de artillería y misiles durante toda la guerra.
«La creación de una zona de amortiguamiento en la región de Kursk es un paso para proteger a nuestras comunidades fronterizas de los ataques enemigos diarios», dijo el ministro del Interior, Igor Klimenko, en Telegram.
La viceprimera ministra ucraniana, Irina Vereshchuk, también dijo que Ucrania abriría «corredores humanitarios» para evacuar a civiles a Ucrania o al interior de Rusia.
La última medida ucraniana provocó que Rusia, enojada, retirara de la mesa las negociaciones de paz en el futuro previsible.
El enviado especial del Ministerio de Asuntos Exteriores ruso, Rodion Miroshnik, dijo en una rueda de prensa el miércoles que Moscú «al menos» suspendería las conversaciones con Ucrania «por un largo período». Las negociaciones de paz entre los países en conflicto han resultado infructuosas desde que comenzó la guerra en febrero de 2022.
La Guardia Nacional Rusa dijo el miércoles que había reforzado las medidas de seguridad alrededor de la planta nuclear de Kursk en el suroeste de Rusia.
La semana pasada, el Director General de la Agencia Internacional de Energía Atómica de las Naciones Unidas instó a ambas partes a ejercer la máxima moderación para evitar un accidente nuclear.
El lunes, Kiev afirmó haber controlado casi la misma cantidad de territorio que Rusia se ha apoderado en lo que va de año, aunque todavía es pequeño en comparación con el territorio ucraniano total que Rusia ha controlado desde que comenzó el conflicto en 2014.
Zelensky dijo el martes que las fuerzas de Kiev controlan 74 asentamientos en Kursk y se estaban preparando para los “próximos pasos” en la región.
Mientras tanto, el presidente ruso Vladimir Putin ha prometido «expulsar al enemigo» de Rusia.
El presidente estadounidense, Joe Biden, habló sobre la incursión el martes y dijo que estaba recibiendo actualizaciones periódicas del personal y que «crea un verdadero dilema para Putin».
